¡Aprovecha tus entrenamientos! Consejos para correr en cinta

La cinta de correr es una excelente alternativa para seguir entrenando cuando hace demasiado frío en la calle, para los días de lluvia, cuando oscurece pronto… En definitiva, es la máquina que necesitamos en casa para continuar con nuestros entrenamientos cuando no podemos salir a correr al aire libre. 

Más allá de esta ventaja, correr en la cinta tiene numerosos beneficios. Uno de los principales es que podrás ajustar tanto la intensidad como el ritmo y la inclinación fácilmente. Además, permite dar versatilidad a nuestros entrenamientos ya que podemos usarla para caminar, para correr, para hacer entrenamientos HIIT y mucho más. 

Si todavía no tienes una cinta de correr en casa, es hora de comprarla. De esta forma, podrás entrenar en cualquier momento. Tendrás acceso a ella siempre que te apetezca correr. Y lo mejor de todo es que podrás encontrar modelos que prácticamente no ocupan espacio porque son plegables. 

Independientemente de cuál sea tu razón para entrenar en la cinta de correr, desde Satymex Sport queremos darte una serie de consejos sobre cómo aprovechar al máximo tus entrenamientos encima de la cinta. ¡Descúbrelos y ponlos en práctica! 

Consejos para correr en la cinta

Calentamiento. Esto ayuda a preparar tus músculos y articulaciones, reducir el riesgo de lesiones y aumentar tu frecuencia cardiaca. Realiza ejercicios de movilidad y estiramientos suaves para activar extremidades y zona central del cuerpo.

Empieza despacio. Empieza de menos a más. Comienza a un ritmo moderado y controlado para realizar un inicio progresivo. 

Resistencia del aire. No es lo mismo correr en la cinta que al aire libre. De hecho, cuando estás en la cinta, parece más fácil correr a un mismo ritmo. Esto se debe en parte a que  no nos encontramos con la resistencia del aire ni tampoco con cuestas. Para compensar la resistencia del aire, ajusta la inclinación a 1%. 

Postura. Cuando se corre en la cinta, inconscientemente miramos hacia abajo. ¡Evítalo! Mira hacia adelante. Mantén la espalda recta, los hombros relajados y los brazos en un ángulo de 90 grados. No te inclines hacia adelante o hacia los lados. Evita agarrarte a la barra de apoyo a menos que sea necesario para mantener el equilibrio.

Cinta de correr
Cinta de correr

Hidratación. Corriendo en la cinta puede parecer que sudas más que en la calle. Por eso deberás tener a mano una toalla para secarte el sudor y una botella de agua para compensar la pérdida de fluidos. Bebe pequeños sorbos mientras entrenas. 

Ajusta la inclinación. Cambiar la inclinación durante tu entrenamiento puede ayudarte a trabajar diferentes grupos musculares y aumentar la intensidad. Por ejemplo, una inclinación más alta simula una subida, lo que fortalece tus músculos y aumenta la quema de calorías.

Varía la velocidad. Correr en cinta te permite controlar la velocidad de tu entrenamiento de manera precisa. Aprovecha esta ventaja y variando la velocidad aumentarás la intensidad durante tu sesión. Puedes realizar intervalos de alta intensidad alternando sprints y períodos de recuperación. Esto ayudará a mejorar tu resistencia cardiovascular y quemar más calorías. 

Variedad en tus entrenamientos. Para evitar entrenar siempre en las mismas condiciones, añade variedad a tus entrenamientos. ¿Cómo? Añadiendo pendiente o entrenando con intervalos. Otra gran idea son los programas que incluyen algunas de nuestras cintas de correr como, por ejemplo, Sprint 8, un entrenamiento a intervalos de alta intensidad. También podrás ver tus programas favoritos o escuchar música gracias a nuestras consolas y altavoces incluidos. 

Música favorita
Música favorita

Sigue corriendo en la calle. ¿Sabías que correr al aire libre ayuda a mejorar los entrenamientos en cinta? Además, mejorará tu estado de ánimo y le dará la variedad que necesitan tus entrenamientos para evitar el estancamiento deportivo. Combina las sesiones en la cinta de correr con sesiones al aire libre. 

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